sábado, 17 de diciembre de 2016

Las iglesias de París, San Pablo y San Luis

Iglesia de San Pablo y San Luis
en el barrio de Marais
La historia de la iglesias parisinas también es la de su destrucción por la rabia y manipulación de las turbas. Algo que pusieron en práctica la tropas de Napoleón en España posteriormente y los comunistas y anarquistas en 1936.

Las masas populacheras y sus promotores intelectuales del París de las revoluciones de 1789, 1820, 1830, 1848 y 1871 situaron a la Iglesia de Francia en el punto de mira del anticlericalismo más violento.

En 1792, 5 sacerdotes fueron asesinados en la iglesia de San Pablo durante la Matanzas de septiembre, lo cuál se recuerda en una placa.

Durante la revolución de 1830, en reacción a los excesos de los ultrarrealistas del “parti prêtre” (el partido clerical) del final de la Restauración, los rebeldes saquearon el arzobispado de París, Notre Dame y varias casas de las congregaciones religiosas.

Posteriormente, la Iglesia francesa siguió sufriendo agresiones en su patrimonio artístico y en las vidas de sus religiosos, muchas veces con la connivencia de los poderes públicos, que deseaban también sacudirse de su influencia.

El Ayuntamiento de París después del incendio
por La Comuna de París de 1871
El asesinato de religiosos, el saqueo y la quema de iglesias y conventos, e incluso de edificios civiles como el Hôtel de Ville (1871) afectaron gravemente al orden público y al rico legado bibliográfico contenido en ellos, tal vez con la intención de dejar ágrafa la memoria de Francia y de los franceses para imponer nuevas ideas por la fuerza.

La bella iglesia de San Pablo y San Luis es un ejemplo histórico de esto que decimos.

Accedimos a ella por un misterioso corredor, más propio de callejón de crímenes, al estilo de los de la Rue Morgue de Allan Poe … sin embargo al final nos esperaban los suelos ajedrezados y las bóvedas de la gran iglesia de Saint Louis, sin más humanos que nosotros y un par de mujeres jóvenes que discutían sobre asuntos propios de la iglesia. 

Apena pensar en los iconoclastas que no ven más que en estos muros e imágenes la parafernalia del engaño y el gancho de la credulidad, la ruina del raciocinio y los privilegios de una clase que vive del cuento y de la indecencia de los demás.

Pero, lo queramos o no, esta iglesia es la historia viva de las creencias de Francia, de su expresión filosófica, política y artística, y un legado para los siglos venideros que los incultos e iracundos no tienen derecho a arrebatarnos sólo para aplacar su ira.


CRONOLOGÍA


Pasillo lateral. Al fondo,
Nuestra Señora de los Siete Dolores,
de Germain Pilon (1586)
632-642 Construcción de la Capilla Saint-Paul des Champs dedicada a San Pablo el Ermitaño (actualmente en el 30 de la calle Saint Paul). Es la iglesia del cementerio de un convento fundado por San Eloy en la Isla de la Cité.

1125   Una iglesia sustituye a la antigua capilla y se erige como parroquia bajo la advocación del apóstol San Pablo.

1358   Carlos V traslada su palacio real al Hôtel Saint Pol, situado en la calle Saint-Paul. Carlos VI y Carlos VII son bautizados en Saint-Paul, que es parroquia real hasta 1559, después de la muerte de Enrique II, herido en un torneo en la calle Saint-Antoine.

1430-1431 Reconstrucción de la iglesia Saint-Paul.

1580   El cardenal de Borbón, tío de Enrique IV, compra el Hôtel de la Rochepot y lo cede a la Compañía de Jesús fundada por Ignacio de Loyola. Los jesuitas construyen la primera capilla Saint-Louis donde es bautizada la escritora Marquesa de Sevigné en 1626.

7 de marzo de 1627 Luis XIII pone la primera piedra de la actual iglesia Saint- Louis.

9 de mayo de 1641 El cardenal Richelieu celebra la primera misa en Saint-Louis.

1764   Luis XV expulsa a los jesuitas de Francia. La capilla de Saint-Louis es confiada al Convento de Santa Catalina situado en la plaza del Mercado Santa Catalina.


Tridacna con agua bendita,
regalo de Víctor Hugo
1789   Destrucción de la Bastilla. La capilla Saint-Louis sirve de depósito a las obras de arte y a los libros recuperados en los lugares de culto del barrio.

1792   Cinco sacerdotes de la parroquia Saint-Paul son asesinados durante las matanzas de septiembre. Robespierre predica en Saint-Louis el Culto a la Razón en 1793.

1798   La iglesia Saint-Paul es vendida y destruida. Un lienzo de la pared de la torre cuadrada es aún visible en la calle Saint-Paul.

1802   Napoleón devuelve al culto católico la iglesia Saint-Louis, la cuál acaba por ser parroquia Saint-Paul Saint-Louis tras la destrucción de la iglesia Saint-Paul. Se recuperan una campana de Saint-Paul, así como el gran reloj de la fachada actual.

1804-1840   La iglesia es restaurada por el arquitecto Baltard.

1831 Revolución “Tres Gloriosas”: saqueo de la iglesia.

1871   Comuna de París: de nuevo, saqueo de la iglesia.

1975  La iglesia Saint Gervais, cuyo territorio pertenece a la parroquia Saint-Paul Saint-Louis, es confiada a las Fraternités Monastiques de Jérusalem.

2012-2015 Se restauran la fachada y el linternón del domo.



MATANZAS DE RELIGIOSOS Y DESTRUCCIÓN DE SÍMBOLOS


Ataque a la abadía de Saint Germain des Prés,
dirigidos por MaillardSeptiembre de 1792, París
Para entender la agresividad de las personas de una determinada sociedad contra los símbolos religiosos, y no caer en el descrédito espurio, debemos realizar historiografía comparada. Pensemos, si no, en la Abadía de Westminster, que sufrió daños en 1640 al ser atacada por puritanos, pero que no fue saqueada al ser secularmente protegida por el estado, cosa que no ocurrió en París con sus iglesias.

Pero pensemos también en la destrucción de la escultura funeraria ibérica, en la creencia admitida actualmente de que se trató de un rechazo a los símbolos antiguos debido a una crisis generalizada mediante una actitud iconoclasta, aunque quizá también de rechazo a la clase dirigente.
Martirio del Convento de los Carmelitas
Septiembre de 1792, París

Y, como no, en la España del XIX, con la quema de conventos por los invasores napoleónicos, algo que tristemente se puso de moda en años posteriores: la matanza de frailes en Madrid en 1834, acusándolos de haber propagado el cólera, y un largo etcétera hasta la locura de 1936.

"La clase obrera ha resuelto el problema de la Iglesia, sencillamente no ha dejado en pie ni una siquiera [iglesias] (...) hemos suprimido sus sacerdotes, las iglesias y el culto."

Andrés Nin, La Vanguardia, 2/08/36. Biblioteca de La Vanguardia


El hispanista Stanley G. Payne relaciona la magnitud del caso de la última contienda civil española con otros periodos revolucionarios:

"La persecución de la Iglesia católica fue la mayor jamás vista en Europa occidental, incluso en los momentos más duros de la Revolución francesa."


Momias de religiosos profanadas
Barcelona, Guerra Civil Española
En cuanto a lo que se conoce como el "martirio de las cosas", durante la contienda española de 1936 resultaron destruidas 20.000 iglesias, entre ellas varias catedrales, incluyendo su patrimonio artístico y sus archivos, tanto como resultado de las acciones revolucionarias como por efectos de bombardeos indiscriminados como los de Guernica y Durango.

Por ejemplo, en Madrid fueron destruidas casi todas las iglesias, por lo que quizá la saña revolucionaria anticlerical en el París de 1789 no nos parezca ahora tan abominable.

Quienes se dedican a investigar sobre sus antepasados y se topan con la quema de los archivos eclesiásticos, entenderán perfectamente el daño que se ha hecho al pasado y a la comprensión del presente.


Dirección

Iglesia de San Pablo y San Luis
99 Rue Saint-Antoine, 75004 Paris


Enlace












No hay comentarios:

Publicar un comentario